Catalina Lavitola: La chica de Tigre que sueña con recorrer el mundo

Mejor conocida como Cali, la licenciada en administración de empresas lleva casi un año viviendo en el continente oceánico. En este viaje que le permitió conocerse y encarar un proceso introspectivo con ella misma, la joven además busca poder formarse como profesional del cine y la fotografía para poder trabajar y conocer el mundo. 

Emigrar y empezar de cero en otro país, alejado de la familia, los amigos, todo lo conocido e incluso con otro idioma, implica una decisión que hay quienes necesitan meses para procesar y otros que pueden tomarla de un minuto para el otro, permitiendose saltar y que el destino los sorprenda. 

Este último es el caso de Catalina, una argentina de 27 años, oriunda de la ciudad bonaerense de Tigre que luego de vivir un año en Estados Unidos, trabajando de baby sitter en una casa de familia, no dudó en tramitar la visa Working Holiday para viajar a Australia en busca de nuevos desafíos y con una meta clara, ahorrar lo suficiente para poder estudiar cine y/o fotografía en España, profesiones que le permitirán recorrer el mundo trabajando y haciendo lo que ama. 

“El sueño de mi vida es poder dedicarme a eso y vivir viajando y sacando fotos, rodearme de gente piola, enamorarme, terminar de definir quién soy yo y que me gusta”. 

La joven licenciada en administración de empresas junto a su familia.

El desafío más grande que Cali debió enfrentar en su paso por USA durante el 2022, fue asumir el rol de cuidado de niños que recientemente habían perdido a su mamá, cuando ella aún se encontraba transitando el duelo luego de haber perdido a la suya a los 23 años de edad. 

“Creo que fue remover un poco el pasado, ser más buena conmigo misma y entender por qué era de cierta forma, no era rara, sino de que había pasado esto. Empezar a valorar todo lo que tuve y no mirar tanto lo que no tuve, todo ese proceso mental cambió un poco mi cabeza”. 

La licenciada en administración egresada de la UBA en el 2020, cuenta que actualmente se encuentra en la ciudad de Airlie Beach, en el Estado Queensland, trabajando en un local de comidas y explica que vivir en otro país le implicó amigarse con su soledad para aprender a estar consigo misma. 

“Toda la vida me vi como un combo con la gente que me rodeaba, era hija de, sobrina de, amiga de, pero nunca era Cali, sino que iba acompañada de todo ese combo y era un círculo muy, muy cerrado, con la familia que me tocó y el grupo amigas del colegio que me tocó”. 

Según revela, el viajar sola le permite “hacer y moverse con total libertad”, como así también elegir qué contar y qué dejar de lado o guardarse para ella misma a la hora de presentarse, algo que también la ayuda a conocerse, ya que es quien debe seleccionar las palabras para definirse ante los demás. 

Catalina sueña con poder recorrer el mundo trabajando de lo que ama, el cine y la fotografía

Cali se describe como una persona que tiene muchas cosas por resolver, que está tratando de sanar, que tiene que amigarse con ella misma, con su cuerpo y su imagen. Es una chica en búsqueda de la felicidad y de definir quién es.

En esa línea cuenta que su casa es su zona de confort, ya que es el lugar en el que pasó toda su vida y la describe como “una cuna de cristal”, donde se siente protegida junto a su familia y sus amigos de toda la vida. Estos últimos no son muchos, ya que no es “muy amiguera” y le gusta tener amigas más cercanas con las cuales tener una relación más cercana y del “mano a mano”.

En enero del 2023, después de pasar un año en Estados Unidos, Cali volvió a Argentina con ganas de seguir viajando, por lo que tramitó el pasaporte italiano. Pero fue a partir de la sugerencia de una amiga y a que “estaba abierta a dónde la lleve la vida” que decidió aplicar a la Working Holiday Visa de Australia, territorio al que arribó en julio de ese mismo año. 

Ya en el continente oceánico, Cali se enfocó mucho más en su presente y futuro, lo que le permitió concebir como “un regalazo de la vida” el hecho de poder elegir cambiar de trabajo si no se siente cómoda en él, elegir con qué personas relacionarse, qué comer, qué hábitos tener, entre otras elecciones que hace día a día, sin preocuparse por el qué dirán, por si es lo correcto o lo que se espera de ella o no, sino pensando en ella misma y su bienestar.

Cali junto a su grupo de amigas de toda la vida.

“Creo que en Australia la enseñanza fue la libertad y el lujo de vivir de una forma, laburar de lo que sea que labures -no importa no sos ni más ni menos que nadie- y tener una vida de darte lujos, viajar como en un primer mundo, poder ir al súper, comprarte una palta y frutos rojos, si quieres desayunar eso que yo en Argentina no lo podía hacer. Me enseñó que aunque nadie te regala nada, podés ponerte metas y saber que son logrables”.

Sobre su futuro, la licenciada reveló que aunque le encantaría vivir en Argentina, hoy no encuentra su lugar ahí y tampoco sabría qué haría, dado que producto del complejo panorama económico debería trabajar de lo que haya, sólo para poder vivir e intentar llegar a fin de mes. 

Así mismo, en el mes de julio tiene pactado un viaje de visita a su tierra natal, para ir de viaje con su familia y volver en septiembre a Sydney, lista para empezar su segundo año de visa, ya con la vista puesta en España, donde iniciará sus estudios en el año 2025. 

Por Paula Boratti. 

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Mejor conocida como Cali, la licenciada en administración de empresas lleva casi un año viviendo en el continente oceánico. En este viaje que le permitió conocerse y encarar un proceso introspectivo con ella misma, la joven además busca poder formarse como profesional del cine y la fotografía para poder trabajar y conocer el mundo. 

Emigrar y empezar de cero en otro país, alejado de la familia, los amigos, todo lo conocido e incluso con otro idioma, implica una decisión que hay quienes necesitan meses para procesar y otros que pueden tomarla de un minuto para el otro, permitiendose saltar y que el destino los sorprenda. 

Este último es el caso de Catalina, una argentina de 27 años, oriunda de la ciudad bonaerense de Tigre que luego de vivir un año en Estados Unidos, trabajando de baby sitter en una casa de familia, no dudó en tramitar la visa Working Holiday para viajar a Australia en busca de nuevos desafíos y con una meta clara, ahorrar lo suficiente para poder estudiar cine y/o fotografía en España, profesiones que le permitirán recorrer el mundo trabajando y haciendo lo que ama. 

“El sueño de mi vida es poder dedicarme a eso y vivir viajando y sacando fotos, rodearme de gente piola, enamorarme, terminar de definir quién soy yo y que me gusta”. 

La joven licenciada en administración de empresas junto a su familia.

El desafío más grande que Cali debió enfrentar en su paso por USA durante el 2022, fue asumir el rol de cuidado de niños que recientemente habían perdido a su mamá, cuando ella aún se encontraba transitando el duelo luego de haber perdido a la suya a los 23 años de edad. 

“Creo que fue remover un poco el pasado, ser más buena conmigo misma y entender por qué era de cierta forma, no era rara, sino de que había pasado esto. Empezar a valorar todo lo que tuve y no mirar tanto lo que no tuve, todo ese proceso mental cambió un poco mi cabeza”. 

La licenciada en administración egresada de la UBA en el 2020, cuenta que actualmente se encuentra en la ciudad de Airlie Beach, en el Estado Queensland, trabajando en un local de comidas y explica que vivir en otro país le implicó amigarse con su soledad para aprender a estar consigo misma. 

“Toda la vida me vi como un combo con la gente que me rodeaba, era hija de, sobrina de, amiga de, pero nunca era Cali, sino que iba acompañada de todo ese combo y era un círculo muy, muy cerrado, con la familia que me tocó y el grupo amigas del colegio que me tocó”. 

Según revela, el viajar sola le permite “hacer y moverse con total libertad”, como así también elegir qué contar y qué dejar de lado o guardarse para ella misma a la hora de presentarse, algo que también la ayuda a conocerse, ya que es quien debe seleccionar las palabras para definirse ante los demás. 

Catalina sueña con poder recorrer el mundo trabajando de lo que ama, el cine y la fotografía

Cali se describe como una persona que tiene muchas cosas por resolver, que está tratando de sanar, que tiene que amigarse con ella misma, con su cuerpo y su imagen. Es una chica en búsqueda de la felicidad y de definir quién es.

En esa línea cuenta que su casa es su zona de confort, ya que es el lugar en el que pasó toda su vida y la describe como “una cuna de cristal”, donde se siente protegida junto a su familia y sus amigos de toda la vida. Estos últimos no son muchos, ya que no es “muy amiguera” y le gusta tener amigas más cercanas con las cuales tener una relación más cercana y del “mano a mano”.

En enero del 2023, después de pasar un año en Estados Unidos, Cali volvió a Argentina con ganas de seguir viajando, por lo que tramitó el pasaporte italiano. Pero fue a partir de la sugerencia de una amiga y a que “estaba abierta a dónde la lleve la vida” que decidió aplicar a la Working Holiday Visa de Australia, territorio al que arribó en julio de ese mismo año. 

Ya en el continente oceánico, Cali se enfocó mucho más en su presente y futuro, lo que le permitió concebir como “un regalazo de la vida” el hecho de poder elegir cambiar de trabajo si no se siente cómoda en él, elegir con qué personas relacionarse, qué comer, qué hábitos tener, entre otras elecciones que hace día a día, sin preocuparse por el qué dirán, por si es lo correcto o lo que se espera de ella o no, sino pensando en ella misma y su bienestar.

Cali junto a su grupo de amigas de toda la vida.

“Creo que en Australia la enseñanza fue la libertad y el lujo de vivir de una forma, laburar de lo que sea que labures -no importa no sos ni más ni menos que nadie- y tener una vida de darte lujos, viajar como en un primer mundo, poder ir al súper, comprarte una palta y frutos rojos, si quieres desayunar eso que yo en Argentina no lo podía hacer. Me enseñó que aunque nadie te regala nada, podés ponerte metas y saber que son logrables”.

Sobre su futuro, la licenciada reveló que aunque le encantaría vivir en Argentina, hoy no encuentra su lugar ahí y tampoco sabría qué haría, dado que producto del complejo panorama económico debería trabajar de lo que haya, sólo para poder vivir e intentar llegar a fin de mes. 

Así mismo, en el mes de julio tiene pactado un viaje de visita a su tierra natal, para ir de viaje con su familia y volver en septiembre a Sydney, lista para empezar su segundo año de visa, ya con la vista puesta en España, donde iniciará sus estudios en el año 2025. 

Por Paula Boratti. 

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